
23,00€
La amplia carrera como director de escena de Ángel Fdez. Montesinos abarca ámbitos tan diversos como el teatro clásico, la alta comedia, el drama, el teatro para niños, la zazuela, el musical y los recitales poéticos y líricos, sin olvidar su experiencia en diferentes programas de televisión. Su testimonio constituye una amena crónica de la actividad teatral española de los últimos cincuenta años.
Las “memorias dialogadas” de Ángel Fernández Montesinos son un ejemplo excelente y poco habitual de que la historia del teatro y la historia de la literatura dramática, aun estando fuertemente emparentadas, quedan muy lejos de ser lo mismo. Seguramente, no es éste un hecho que deba ser especialmente subrayado a los lectores de esta revista, pero merece la pena hacerlo en esta ocasión, porque lo cierto es que no abundan en el mundo editorial las pruebas prácticas que lo corroboran.
Durante un dilatado período de tiempo, Ángel Fernández Montesinos y Ángel Martínez Roger mantuvieron largas conversaciones sobre la trayectoria del director de escena. El resultado de estos repetidos encuentros son casi trescientas páginas que, en forma dialogada, recogen la singular experiencia profesional del primero.
Singular por varios motivos: por su extensión, pues abarca casi treinta años de constante ejercicio de la práctica teatral; por su intensidad, ya que se ha materializado, hasta la fecha, en un total de 137 espectáculos, lo que da lugar a un mareante índice de más de 4 estrenos anuales; por su variedad, porque el trabajo de Fernández Montesinos se ha desarrollado de manera continuada no sólo en ámbitos institucionales muy diversos (los Teatros de Cámara y Ensayo, el Teatro Universitario, el Teatro Nacional de Juventudes, la empresa privada, el teatro público, la TVE, etc.), sino a través de géneros también muy diversos (el musical, la zarzuela, el drama contemporáneo, los clásicos, la comedia, el vodevil, el género policíaco, el teatro infantil), en algunos de los cuales este director de escena es referencia indiscutible; y por su relevancia, no sólo en razón de los muchos éxitos cosechados (una larga lista en la que figuran Por la calle de Alcalá, Filomena Maturano, Mamá quiero ser artista, Maribel y la extraña familia, Con la mosca en la oreja, La Calesera, La mamma, El mundo de Suzie Wong, La huella, La revoltosa, La casa de los siete balcones, etc.), sino también de los profesionales con los que fueron realizados (Lola Membrives, Concha Velasco, Celia Gámez, Conchita Montes, Nati Mistral, Amparo Rivelles, Paco Valladares, Analía Gadé, Carmen Bernardos, Carlos Ballesteros, José Luis Pellicena, Irene Gutiérrez Caba, Luis Prendes, Mary Carrillo, Ángel Picazo, Emilio Burgos, Vitín Cortezo, etc.) o los autores puestos en escena (Mihura, Casona, Gala, Lope de Vega, Valle-Inclán, Osborne, Shaffer, De Filippo, Salom, Arniches, Galdós, etc.).
Todos ellos, y muchos otros, son fuente de multitud de anécdotas que se van desgranando a lo largo del libro, salpicadas frecuentemente por la impagable ironía de Fernández Montesinos y abordadas, también frecuentemente, con extrema claridad (véanse, a título de ejemplo, las referencias del director al cierre del Teatro Nacional de Juventudes, a los criterios de contratación de directores en determinados teatros públicos, a las relaciones laborales de los directores con no pocos empresarios y productores, al deterioro de algunas pautas de comportamiento en el seno de la profesión teatral, etc.) .
Por otro lado, es de agradecer el rigor con el que el director de escena y el editor del libro han elaborado la información, pues no todo se deja a la memoria -sin duda, excelente- de Fernández Montesinos, sino que se ve enriquecido por una minuciosa labor de documentación que aporta abundantes referencias sobre los lugares, fechas, profesionales, declaraciones públicas, etc., relacionados con cada espectáculo que se menciona.
Pero el libro es más, mucho más, que una larga colección de anécdotas ilustrativas y esclarecedoras. Es también -y algunos diríamos que sobre todo– lo indicado al comienzo de estas líneas: un sólido ejemplo y un rico testimonio de la historia del teatro español considerado como un todo (es decir, del sistema teatral español, si se nos permite ponernos estupendos). O, si se prefiere, una historia del teatro español “en estado práctico”.
Ángel Fernández Montesinos aborda en él cómo se organizaban las giras de las compañías, qué criterios económicos y de programación se aplicaban en cada plaza, cómo eran las relaciones entre los diferentes profesionales, el funcionamiento de la estructura empresarial, el desarrollo de los ensayos, la creación de los repertorios, el devenir del género musical, las reacciones de los públicos, la elección de las obras y los profesionales, el diseño y elaboración de las escenografías, etc. Es decir, un amplio conjunto de temas que son elementos fundamentales de la estructura real de nuestro teatro y que muy pocas veces son objeto de estudio.
Rara vez le es dado al lector disponer de una información tan directa y detallada acerca de todos estos temas. Por ello, las memorias dialogadas de Fernández Montesinos, sobre ser extraordinariamente amenas, son además un documento imprescindible para conocer cómo ha sido la evolución del teatro español a lo largo de las últimas décadas.
Alberto Fernández Torres
Edición de Ángel Martínez Roger.
Madrid, 2008; 295 pgs.
ISBN: 978-84-95576-86-6